El An-225, el avión más grande del mundo, guarda reposo en la antigua base aérea ucraniana donde la Unión Soviética (URSS) realizaba pruebas de vuelo secretas y que hoy funciona como el aeropuerto de Gostomel. La Corporación de la Industria del Espacio Aéreo de China (AICC) firmó el año pasado un acuerdo con Antonov Airlines, para el lanzamiento de satélites desde el aparato cuya mayor avión de carga del mundo, el An-225.
«El An-225 podría lanzarlos desde cualquier altura inferior a los 12.000 metros. Su tiempo de lanzamiento es flexible, preciso y es capaz de poner el satélite en la órbita deseada de forma rápida, lo que reduce mucho los costes», afirmó el director de AICC, Zhang Yousheng a la BBC.
Los nuevos planes para Mriya pasan por incrementar el peso que puede soportar el avión hasta convertir a China en la nación con más capacidad de carga del mundo. China no pretende comprar el An-225, sino usar el concepto ya existente para abrirse camino en en la indistria del lanzamiento de satélites, informó esta semana la agencia de noticias Europa Press.
Para ello, el proyecto de la AICC prevé la construcción de una flota de 1.000 unidades de este modelo.
