El proyecto Bloodhound SSC ya tiene fecha para intentar alcanzar los 1.600 km/h: octubre de 2017. Justo veinte años después tratarán de batir el récord de velocidad absoluta que ostenta desde el 15 de octubre de 1997 cuando consiguió registrar la velocidad de 1.277,98 km/h. Andy Green fue el piloto entonces y volverá a estar ahora a los mandos del bólido.
Hakskeen Pan, en el Cabo Noreste de Sudáfrica, ha sido el lugar seleccionado para llevar a cabo el intento de récord. Un Boeing 747 trasladará el vehículo supersónico acompañado de 16 containers, que servirán de taller para la Bloodhound SSC, además de disponer de un estudio de televisión con el que retransmitir en directo las pruebas y el intento. Se prevé, incluso, que se construya un asentamiento en el que todos trabajen en el proyecto.
Castrol, Rolls Royce o Jaguar son varios de los principales patrocinadores con los que contará la Bloodhound SSC. El proyecto, antes de buscar el récord, realizarán unas pruebas a 352 km/h en el aeropuerto de Newquay (Reino Unido) en junio de 2017. Además, se entrenará en el proceso de 40 minutos que se necesita para volver a llenar los depósitos del coche-cohete y que esté listo para una segunda pasada.