En el conjunto de España los automóviles híbridos, eléctricos y con propulsores de gas suman dos millones y representa el 8,2 por ciento.
El parque de turismos con propulsores ‘limpios’ -híbridos, eléctricos o de gas- todavía es minoritario en Castilla y León. Aunque cada vez son más los ayuntamientos que han declarado la guerra a los vehículos diesel y han fijado fechas para prohibir su circulación por el centro de las ciudades, y a pesar de que los motores de gasolina empiezan a imponerse en ventas a los de gasoil.
Castilla y León, con 72.253 turismos ‘limpios’, que representa el 5,2 por ciento del total, ocupa los últimos puestos, sólo por delante de Castilla-La Mancha (4,2 por ciento), Madrid (4 por ciento) y Extremadura (3,7 por ciento), y muy lejos de Baleares, donde el porcentaje supera el 15 por ciento, y tres puntos por de bajo de la media española (8,2 por ciento), según el informe ‘¿Cómo se mueve tu coche?’, elaborado por la Asociación Empresarial del Seguro (Unespa).
Para elaborar este informe, consultado por Ical, Unespa utilizó los datos recabados por la Estadística del Seguro del Automóvil (ESA), que cifra en 23 millones los turismos asegurados en España. De estos, dos millones de automóviles se mueven gracias a motores no convencionales (8,2 por ciento). El resto corresponde a coches diésel (13,8 millones) y gasolina (7,4 millones). En Castilla y León los turismos diesel suman 869.268 y los gasolina 448.233.
El ranking por provincias con mayor cantidad vehículos limpios en relación al tamaño de su parque móvil está liderado por Baleares (15,2 por ciento), Guipúzcoa (14,5 por ciento) y Barcelona (13,4 por ciento). En el extremo opuesto, con las ratios más bajas de coches híbridos y eléctricos respecto del total del parque móvil, se sitúan Teruel (1,4 por ciento), Segovia (2,7 por ciento) y Cuenca (2,8 por ciento).
En conjunto de Castilla y León, Burgos es la provincia más ‘verde’ en este aspecto con un 8,47 por ciento de los turismos con motores ‘limpios’, por delante Valladolid (5,51 por ciento), Zamora (5,48 por ciento), Salamanca (5,14 por ciento) y León (5,05 por ciento). Segovia, con un 2,76 por ciento, es la provincia con turismos más contaminantes, por delante de Ávila (3,07 por ciento), Palencia (3,47 por ciento) y Soria (4,33 por ciento).
Un análisis del reparto por municipios desvela que Barcelona (60.888), Madrid (55.786), Valencia (29.500) y Zaragoza (22.064), son las ciudades con más coches limpios en términos absolutos, pero la radiografía cambia cuando se analiza la cantidad de coches menos contaminantes en relación con el tamaño del parque móvil local. Bajo esta óptica, la localidad valenciana de Jávea (27 por ciento), la murcia Mazarrón (23 por ciento) y Calvià, en Baleares, con un 21 por ciento, son los municipios con una mayor proporción de vehículos híbridos y eléctricos. Entre los veinte primeros no aparece ninguno de Castilla y León.
El mapa de vehículos limpios de España muestra cómo estos automóviles tienen una presencia especialmente destacada en las zonas de playa, ya sea en el Mediterráneo, en el Cantábrico o en el Atlántico. A estas se puede sumar algunas grandes poblaciones del interior como Madrid, Zaragoza y Sevilla. Esta prevalencia está ligada a la presencia de coches de alquiler para turistas, por un lado; y a las soluciones de movilidad por minutos existentes en las grandes urbes, por otro.
Coche eléctrico
El estudio también elabora un retrato robot del tipo de conductor que lleva cada turismo. En el caso de los coches híbridos y eléctricos, predominan las personas de entre 45 y 55 años, tanto en el conjunto de España como en Castilla y León.
En cuanto al coche eléctrico cien por cien, su implantación todavía es anecdótica. Según datos provisionales de la Dirección General de Tráfico, en el conjunto de España están matriculados 23,6 turismos, de los que sólo 14.842 son eléctricos, mientras que en el conjunto de Castilla y León, con un parque de casi 1,3 millones de automóviles, sólo 253 son eléctricos.
En un nivel similar al eléctrico se encuentran los motores de gas licuado. En la Comunidad se contabilizan 266 y en el conjunto de España poco más de 10.000.