El reciente campeón del mundo de MotoGP visitó algunos de los proyectos de la Fundación Vicente Ferrer en la India. Jorge Lorenzo conoció de primera mano proyectos relacionados con la infancia, la discapacidad y el deporte, como la escuela de tenis financiada por la fundación de Rafa Nadal, y la Academia Special Olympics, lugar donde entrena un grupo de deportistas con discapacidad intelectual.
Junto al director de programas de la fundación, Moncho Ferrer, el mallorquín recorrió el centro de menores huérfanos, la unidad pediátrica del Hospital de Bathalapalli, que cuenta con 75 camas, consultas externas, una unidad de cuidados intensivos especializada y un servicio de neonatología.
Esta organización lleva 46 años impulsando su programa de desarrollo integral de lucha contra la pobreza. En la localidad inida de Anantapur, el tres veces campeón del mundo de MotoGP, a través de las redes sociales, se mostró realmente emocionado: «Increíble descubrir todo lo que hace la Fundación Vicente Ferrer. Día muy especial en todos los sentidos». También aseguró que «ha sido fantástico» compartir momentos con los niños y las niñas de la fundación, porque «a pesar de las dificultades, su sonrisa es permanente».
«La ilusión por mejorar y la voluntad de crecer a través del deporte ayudará a estos atletas a superarse en muchos ámbitos de su vida», aseguró el piloto balear al visitar el centro de parálisis cerebral de la Fundación Vicente Ferrer. En ella se realizan actividades terapéuticas y se enseñan habilidades básicas para la vida diaria. Allí, jugó a bádminton y tenis de mesa con un grupo de deportistas con discapacidad intelectual.
Actualmente, esta ONG trabaja en 3.235 pueblos y de su labor se benefician más de dos millones y medio de personas. Está comprometida con el proceso de transformación de una de las zonas más empobrecidas de la India y de algunas de las comunidades excluidas y marginadas por el sistema de castas.
